Las hojas de moringa cuentan con nutrientes y antioxidantes en alta concentración que son de gran provecho para la salud. Asimismo, esta planta favorece a las personas que la utilizan para enfrentar las enfermedades degenerativas. En este sentido, esta planta posee grandes beneficios que podrás conocer en este apartado.
La moringa
La moringa o árbol de la vida es una planta medicinal que aporta grandes beneficios en cuanto a salud a quienes la utilizan. De esta manera, el nombre científico de esta planta es moringa oleífera y se caracteriza por contener gran cantidad de vitaminas y minerales. Por ejemplo, el hierro, carotenoides, quercetina, vitamina C, ácido clorogénico, polifenoles entre otros.
Todos estos elementos otorgan a la planta excelentes propiedades y efecto antidiabético, antioxidante, antimicótico, antiinflamatorio, antidepresivo, antiviral y analgésico. En este sentido, la parte más utilizada de la moringa son sus hojas, que es donde está presente la mayor concentración de antioxidantes. Además, las personas pueden consumirlas en polvo, en cápsulas y en forma de té.
De la moringa también se puede consumir sus semillas, así como en su presentación de aceite. De esta manera, durante mucho tiempo se ha utilizado la moringa para la salud debido a todas las propiedades medicinales que posee, así como todos los beneficios que otorga a la salud.
Beneficios de la moringa
La moringa otorga diversidad de beneficios a las personas que la utilizan, estos van desde la salud, la belleza y puede incluso prevenir o favorecer en la mejora de enfermedades y afecciones de salud. En este sentido, la moringa beneficios se presenta en la protección y nutrición de la piel y el cabello ante los radicales libres; además, ayuda a mantenerlo sano y limpio en su presentación de aceite de semilla de moringa.
La moringa cuenta con proteínas que ayudan a proteger las células de la piel, elementos hidratantes y desintoxicantes; asimismo, otorga resultado positivo en la cura de infecciones y llagas de la piel. Por otro lado, esta planta favorece el tratamiento de edemas que es una acumulación de líquido en tejidos del cuerpo, la cual es dolorosa; en este caso, la moringa puede prevenir el desarrollo de esta gracias a su propiedad antiinflamatoria.
La moringa beneficios ayuda a proteger el hígado de los daños originados por el uso de fármacos antituberculosos y acelera su proceso de restauración. Asimismo, sus componentes pueden prevenir el desarrollo del cáncer y evitar el desarrollo de las células cancerosas. De esta manera, otras afecciones para que es buena la moringa es que puede favorecer al tratamiento de trastornos estomacales.
Algunos problemas de estómago y molestias como la colitis ulcerosa, la gastritis y la constipación pueden tratarse con el uso de la moringa. Además, sus propiedades antibacterianas y antibióticas ayudan e impiden el crecimiento de patógenos y su alto contenido de vitamina B contribuye a la buena digestión. Posteriormente, otras de las enfermedades que cura la moringa son las enfermedades bacterianas.
Gracias a sus propiedades antimicrobianas, antimicóticas y antibacterianas, la moringa puede enfrentar infecciones como la Salmonella, E. coli, o el Rhizopus; lo que la convierte en una excelente opción en su tratamiento. Mientras tanto, para que es buena, la moringa es para cuidar los huesos y hacerlos más sanos y fuertes. De esta manera, el consumo de esta planta favorece al tratamiento para la artritis y la cura de huesos dañados.
Si desea conocer para qué sirve la moringa en la mujer, te contamos que ayuda a tratar los trastornos del estado de ánimo como la fatiga, la ansiedad y la depresión; también beneficia a los hombres que la consumen. Además, entre las enfermedades que cura la moringa se encuentran la cicatrización de heridas y disminuye la aparición de cicatrices. En este sentido, los antioxidantes de esta planta pueden prevenir daños cardiacos y otorga salud al corazón.
Enfermedades que cura la moringa
La moringa es una excelente planta que permite curar enfermedades, por lo que sumarla al tratamiento de diversas afecciones de salud puede ser de gran beneficio. En este sentido, una de las enfermedades que cura la moringa son: la diabetes, el asma, la presión arterial alta, los problemas renales, la vista, la anemia y enfermedad de células falciformes.
Las propiedades de la moringa favorecen en la reducción de la cantidad de glucosa en sangre y el azúcar y proteínas de la orina; en consecuencia, se mejora la hemoglobina y el contenido total de proteínas. Por otra parte, para que es buena la moringa en el asma, puesto que facilita la mejora de la función pulmonar y la respiración; asimismo, disminuye la gravedad de los ataques de asma y protege contra las constricciones bronquiales.
La moringa favorece la detención del engrosamiento de arterias que ocasiona la presión arterial alta con sus componentes de isotiocianato y niaziminina. Asimismo, las personas con problemas renales emplean el extracto de moringa para presentar menor propensión al desarrollo de cálculos en riñones, útero y vejiga; puesto que, esta planta cuenta con alto contenido antioxidante que ayuda a disminuir la toxicidad en estos órganos.
En cuanto a la vista para que es buena la moringa, se puede decir que gracias a su concentración de antioxidantes ayuda a detener la dilatación de los vasos de la retina, evita la disfunción de la retina y previene el engrosamiento de las membranas capilares. En este sentido, otra de las enfermedades que cura la moringa es la anemia y la enfermedad de células falciformes. Puesto que, su extracto es excelente para prevenir estas enfermedades, ya que ayuda al organismo a absorber más hierro y aumentar los glóbulos rojos.
¿Quiénes no deben de tomar moringa?
A pesar de la cantidad de excelentes propiedades y beneficios que posee la moringa, su consumo en exceso y sin vigilancia médica puede ocasionar otros problemas o presentar efectos adversos en la persona que la consume. En este sentido, siempre es recomendable que consulte con un médico profesional que conozca acerca del uso de plantas medicinales en las diversas afecciones.
Si su médico le indica o aprueba el uso de esta planta para el tratamiento específico de su afección se aconseja seguir de forma adecuada las indicaciones del mismo. De esta manera, deberá tomarla según las cantidades, horarios y días establecidos por su médico para así evitar el desarrollo de otros problemas de salud. En este sentido, las raíces y la corteza pueden generar efectos abortivos cuando se toman en altas dosis.
Durante el embarazo se debe evitar su consumo así como para las personas que tienen bajos niveles de azúcar para evitar los desmayos, desequilibrios y debilidad. Posteriormente, para saber quiénes no deben de tomar moringa, entre estas se encuentran las personas que padecen insomnio o tienen problemas para dormir deberán evitar consumirla antes de dormir, puesto que, esta es una planta energética y estimulante.
Consumir la moringa en ayunas puede ocasionar acidez gástrica, irritación o reacciones alérgicas en las personas altamente sensibles; no obstante, estos efectos se pueden evitar si se consume acompañada de otro alimento consistente. Asimismo, la moringa cuenta con propiedades curativas, así que puede originar un efecto laxante, sobre todo cuando comienza a consumirla, ya que el organismo no está acostumbrado.
Preparación de la moringa
El té de moringa es la manera más común de su uso debido a su facilidad de preparación y que se puede tomar a cualquier hora del día. De esta manera, para prepararlo se coloca en una olla a hervir 250ml de agua, se añade una cucharada de hojas de moringa, se tapa y se deja reposar por cinco minutos. Posteriormente, se cuela y se toma dos tazas de té al día.
Las semillas se deben descascar y tragarse como una pastilla con un vaso de agua, el máximo que se puede consumir al día son 3 gramos es decir, de dos a tres semillas. Mientras tanto, las capsulas las puede encontrar en una tienda naturista para consumir de una a dos capsulas por día de 200mg en conjunto con la comida. Se recomienda leer la etiqueta o consultar con su médico para la toma correcta diaria.
El polvo de moringa que se obtiene de la semilla, es recomendable consumir entre media a una cucharadita al día; esta se puede agregar a jugos, café, yogurt, sopa o preparar té. Por otro lado, el aceite de moringa comestible es rico en grasas monoinsaturadas y vitamina E; cuenta con una buena relación antioxidante.
Cabe destacar que, la moringa es una planta que aún se encuentra en estudios, por lo que se recomienda no consumirla más de dos a tres semanas. Sobre todo es importante emplearla de la mano de un profesional médico, ya que podría ocasionar contraindicaciones que no sean conocidas. De esta forma, es fundamental que su médico le otorgue las indicaciones precisas y conozca qué está consumiendo.
